Y llegó el día

Tal y como titulo, llegó el día que todos estábamos esperando, ayer se produjo la victoria que tras meses de espera acercaría la salvación de una manera más real y que debía de convencer a todo el zaragocismo de que la salvación es posible por difícil que pudiese parecer semanas atrás. Escépticos y confiados se unieron en el grito, lloro y alboroto con el penalti transformado por Apoño en el último segundo del partido para confirmar que obrar el milagro es posible. La realidad es que ningún equipo ha conseguido levantar 11 puntos de desventaja pero es el coraje de los jugadores el que está desafiando a los datos y a la historia.

Foto: El Periódico de Aragón

Es la consecuencia de la entrega constante de un conjunto que se hace fuerte ante la adversidad dado que los intereses individuales quedan aparte para hacerse uno. La limpieza realizada por Manolo Jiménez ha sido beneficiosa para el objetivo común, por otra parte los sistemas tácticos y decisiones del de Arahal están siendo acorde con las necesidades del momento de tal modo que está premiando a los jugadores que se van encontrando en sus picos de forma de un equipo en el que la calidad y talento es semejante entre unos y otros; el técnico tiene su gran parte de responsabilidad positiva.

Vídeo: cortesía de Luis Ferruz, profesor y catedrático de Economía Financiera y Contabilidad de la Universidad de Zaragoza  

A pesar del citado parecido futbolístico de los jugadores sobre el partido de ayer me gustaría individualizar en varios hombres:

- Roberto: De nuevo seguro bajo los palos en un día con muchas menos intervenciones que en Mestalla, cuando debió de estar concentrado lo estuvo. De nuevo en alza.

- Pinter: La progresión desde que llegó está siendo realmente notable, se encuentra en un alto nivel y ayer fue el mejor del equipo, seguro delante y atrás cubrió los espacios de los compañeros realizando buenas coberturas, realizó pases certeros eligiendo la mejor opción posible. Se animó en ataque tanto cuando jugó en el centro del campo como cuando Jiménez lo reubicó ocupando el puesto de un acalambrado Mateos. Tiene la libertad de movimiento que le ha otorgado el míster y se atreve a intentar las cosas que hace en los entrenamientos, parece estar asimilando los movimientos de los imprescindibles box to box de la Premier.

Foto: Heraldo de Aragón

- Apoño: Fino en el pase y el desborde se movió entre líenas con criterio durante la primera parte en que dio una lección de posicionamiento y saber qué hacer con el balón al pie. Volvió loco a Assunçao que acabó y Simeone se vio obligado a dar entrada a Fran Mérida y Mario Suárez que desconectaron algo a Apoño de sus compañeros en la segunda parte, cogió los galones y tiró con decisión el penalti; era su momento.

- Postiga: recuperado para la causa (si es que llegó a borrarse) está enchufado y participativo, demuestra querer ayudar al equipo y realizó un partido muy completo en la búsqueda de espacios y apertura de huecos para la entrada de compañeros aunque sin embargo no rubricó su participación con un gol. Provocó el penalti y celebró de manera muy efusiva el gol para acabar rendido sobre el césped del Municipal.

Foto: Heraldo de Aragón

Foto: Heraldo de Aragón

Ahora queda mucho por delante, quizá lo más difícil en las 9 fatídicas próximas jornadas que colocarán al Real Zaragoza en la posición que realmente haya merecido en la competición de la regularidad, parte con una desventaja de 6 puntos con un Villarreal que comienza a salir de los últimos puestos y a 6 y 7 puntos de Granada (*con un partido menos) y Betis respectivamente que son para mí los verdaderos rivales del equipo blanquillo. La empresa es complicada pero como rezaba el tifo de Ligallo IMPOSSIBLE IS NOTHING, ahora la plantilla se enfrenta a un gran reto.

Ayer la afición dio una lección de zaragocismo estando a las duras y a las maduras apoyando al equipo hacia la permanencia como nunca y recordando a Agapito Iglesias que no le quiere durante la Agapitada, el máximo accionista en declaraciones a Aragón TV quiso enredar pero, y por enésima vez, terminó derrotado.

Se prepara un viaje masivo para el vital encuentro el próximo sábado en Gijón puesto que la victoria en El Molinón acercaría continuar un año más en la élite del fútbol español, todo lo demás podría alejarlo definitivamente.

Sí, ayer me sentí orgulloso de ser ZARAGOCISTA.