Real Zaragoza 0 - Cordoba 1 [Desde el rival]

Desde el Diario de Córdoba, así cuentan la crónica del partido

Más maña que fuerza

Ni se asciende ni se desciende en septiembre. Ni en febrero o marzo; bueno, salvo que

Foto: Facebook de zaragocistas.com 

estés en Primera. Se ha dicho desde lo más profundo del equipo y se ha repetido en todos sus alrededores. Aunque en esos círculos no hay quien deja de recordar que las sensaciones son las que son más allá de victorias o derrotas. Al menos, hasta ahora. Y esas sensaciones mejoraron anoche con respecto a los tres últimos envites (incluyendo Copa) y se quedaron, aproximadamente, en las transmitidas ante el Valladolid, en el que ya hubo salvedades. Ahora, además, con matices. Ni era el mismo rival, las circunstancias eran otras y el partido discurrió por diferentes derroteros. Lo mejor del triunfo es que esos tres puntos darán tranquilidad a los nerviosos, más de dentro que de fuera, y servirá para seguir trabajando en lo que se tiene que mejorar. Que no es poco, precisamente. No deja de ser sintómatico que en un once inicial continuista, con un cambio obligado (De Tomás), otro de apuesta (Razak) y el otro por el bajo nivel ofrecido hasta ahora por su antecesor (Pedro Ríos), el mejor fuera, precisamente, el jerezano. Y no sólo por el gol, bastante bono, sino por el sacrificio físico que ofreció el ex del Recreativo y empeño de Oltra durante todo el verano.

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Y si ante compromisos anteriores los partidos del Córdoba valían o se depreciaban en una cuantía considerable mirando el nivel del rival, en este también hay que hacerlo. El Zaragoza es un equipo muy parecido al blanquiverde. Algún elemento en defensa que vio de pequeñito el Mundial 86, el de Maradona, un doble pivote con lo justito de creación (por no decir ninguna) y mucha esperanza en las bandas y hombres de ataque, con especial referencia a un ex, Pedro Sánchez.

El alicantino se echó a la espalda a su equipo en los primeros 20 minutos y el Zaragoza le dio más de un dolor de cabeza a los de Oltra. Un ejemplo de lo enchufado que salió es la imagen del minuto 11. Saque de esquina forzado por Stankevicius a centro pasado de Jaime en una jugada iniciada por el mismo Pedro. El 15 bota el primer córner y Deivid, en el primer palo, fuerza otro. De nuevo Pedro y Razak saca el balón por encima del larguero con los dedos. Y de nuevo otro: rechace y disparo desde fuera del área.

Tres minutos después: centro de Rico desde la izquierda a la espalda de la defensa blanquiverde y de nuevo Pedro, solo ante Razak, cabecea alto. El Zaragoza funcionaba, la grada rugía y el Córdoba intentaba sorprender con transiciones rápidas sin éxito. Hasta que una contra de los cordobesistas, con pase de Florin a Pedro Ríos, terminaba con un disparo al primer palo, del portero, que terminaba en la red.

Los locales acusaron el golpe y el Córdoba fue listo. Cerró siempre por dentro y obligó a jugar por las bandas, con especial mención al trabajo de Luso y de Pedro Ríos para ser solidarios por la derecha.

Era llamativo el trabajo de Markovic, ayer muy posicional, jugando casi pinchado por encima de la defensa, mientras que Luso oscilaba a un lado y a otro, suficiente ante la incapacidad por dentro de los blanquillos. Las incorporaciones locales de segunda línea tenían como respuesta un contragolpe cordobesista, no siempre con ideas claras, es cierto, pero cuando se acertaba, generaba el nerviosismo en la grada de La Romareda.

Pudo cerrar el partido el Córdoba entre el 40 y el 42, con sendas ocasiones a la contra de De Tomás y de Florin Andone, pero el madrileño no anduvo clarividente y el rumano se topó con Bono. El escenario de los primeros 20 minutos había cambiado radicalmente y en el último cuarto de hora del primer acto el Córdoba parecía encontrarse más cómodo. Eso sí, con un desgaste físico que ante los problemas del equipo en esa parcela, hacía afrontar el segundo con preocupación.

Un despeje de puños de Razak nada más reiniciarse el encuentro parecía confirmar los malos augurios, pero el Córdoba interpretó el encuentro en un estatus en el que, se adivinaba en las anteriores semanas, se encuentra más cómodo. Al contragolpe vive mejor este equipo, por lo que es mejor que, en ocasiones, sea mejor cederlo. Y se antoja que tendrá que cederlo en no pocas.
A esa primera ocasión respondió el Córdoba con una rápida transición en la que Nando conectó con Florin, que se quedó solo ante Bono sin resultado para el marcador. El Zaragoza se daba cabezazos contra su inoperancia y, en el remate de los infortunios, se lesionó Pedro Sánchez. Jaime intentó igualar el electrónico nada más irse el alicantino, pero el regalo de Razak y Stankevicius no supo digerirlo.

La escasa esperanza del Zaragoza en remontar o al menos salvar un punto se murió con la lesión de Pedro Sánchez, mientras que el Córdoba aguantó el empuje sin ideas de los maños con solidaridad. Era llamativo el trabajo de Pedro Ríos, casi como un lateral derecho bis, ayudando permanentemente a Stankevicius para tapar la banda derecha, mientras que Luso se multiplicaba y corría más hacia las bandas que hacia arriba o hacia abajo. En todo caso, el equipo de Oltra fue consecuente con su momento, tanto físico como anímico, y fue inteligente a la hora de administrar el gol del jerezano durante 70 minutos. Salió con rapidez al área rival, aunque sin fortuna y trabajó a destajo, consciente de las limitaciones (físicas y de otro tipo) que le aquejan de mediocampo hacia atrás. El Córdoba empleó más maña que fuerza.





- Ficha técnica:

0 - Real Zaragoza: Bono; Bertrán, Rubén, Cabrera, Rico; Wilk, Dorca (Erick Morán, min.54); Jorge Díaz (Ortuño, min.45), Pedro (Abraham, min.58), Jaime; Ángel.

1 - Córdoba C.F.: Razak; Stankevicius, Deivid, H. Rodas, Cisma; Nando (López Silva, min.66), Luso (Gálvez, min.84), Markovic, A.J. Ríos; Raúl de Tomás (Caballero, min. 74), Andone.

Gol: 0-1, min.17: A.J. Ríos.

Árbitro: Gorka Sagués Ozcoz, del comité vasco. Amonestó a Dorca (min.50) y Bono (min.67) por los locales y a H. Rodas (min.67) y Gálvez (min.90), por los visitantes.

Incidencias: Partido correspondiente a la cuarta jornada de la Liga Adelante disputado en el Estado de La Romareda ante unos 15.000 espectadores.