GOLPECITO EN LA MESA

Golpecito en la mesa, si. Porque en Riazor pudo ser todo un puñetazo en la mesa, pero se quedo solo en un golpecito en la mesa. Pero golpe al fin y al cabo.

En un ambiente hostil, sobre todo por parte de los aficionados más radicales del Deportivo. Hostilidad que no se si viene desde los tiempos de la eliminatoria de la recopa que nos enfrento en la temporada 95/96; o de la polémica vuelta al Zaragoza de Lafita que se encontraba cedido en Coruña. Aunque, yo creo que viene de hace tres temporadas cuando el Zaragoza se salvo en la última jornada de la mano de Aguirre. Lendoiro que no se esperaba descender, vio con rabia como el Zaragoza salvaba la categoria bajo la batuta del mejicano y los gallegos la perdian.

En medio de tanta rabia y odio, el Real Zaragoza salto al campo en plan dominador. Los aragoneses dominaban y los gallegos contraatacaban. Ocasiones para ambos equipos. En el medio campo José Mari se bate el cobre, mostrándose con más dinamismo e intensidad que Paglialunga.

Tras el descanso los deportivistas salen a intentar ganar el partido. Durante la primera media hora controlan y, con más corazón que cabeza, obtienen algunas ocasiones claras. El Zaragoza aguanta el temporal, se sacude la presión de los locales, vuelve al partido y Víctor astuto consigue un gol de listo. Encima los gallegos que han jugado todo el choque al límite y con numerosas faltas, pierden a Luisinho que se busca a conciencia la segunda tarjeta amarilla. Sin embargo nos meten en la portería a empujones y en el descuento empata el Deportivo.

Yo, que he podido ver jugar in situ al Real Zaragoza tanto en casa como fuera, he observado que Paco Herrera ha implantado en sus jugadores una máxima , que es ir a por el partido, intentar dominarlo y controlarlo, ir a ganar. Esto, ni mucho menos, no es siempre conseguido, pero la impresión que yo me llevo es que los jugadores lo intentan. No salen a ver que pasa, no especulan, intentan mandar durante los partidos. Particularmente, veo con optimismo esta infernal aventura y creo en este bloque, al que no le vendría nada mal un buen central. Pero bueno, esa es otra historia en estos tiempo de mendicidad futbolística.

EDU.