Empiezo esto en el descanso del partido, no quiero ni esperar a que el árbitro pite el final, ojala me equivocase y el equipo remontara en la segunda parte, pero no lo veo , no lo veo porque seguimos instaurados en la mediocridad, en resucitar muertos, en levantar de las tumbas , al estilo de walking dead , a cualquier equipo que medio muerto o muerto entero se cruce en nuestro camino.
No os preocupéis por no ver la foto, es que no hay foto, está vacío, como mi estado de ánimo.
He llegado a casa y Ono no me da la opción de pagar por ver al mi Real Zaragoza, por lo que tengo que tomar la decisión de bajar a “los chinos” del bar de abajo o verlo en internet. Opto por la de casa, y creo que acerté.
En casa no me ve nadie lamentarme, agobiarme, desesperarme por los míos.
Hoy sí que lo he sentido, tal vez el día acompañaba, era domingo, día de fútbol , pero los nuestros no se han enterado , se lo han tomado como una tarde de paseo, en el primer gol toda la defensa, la poblada defensa de 5 sacada por Aguirre se queda mirando como Adrián remata a la red del Real Zaragoza.
El representante de Roberto debe estar frotándose las manos, con una defensa así su pupilo seguro que toca muchas pelotas, aunque sea para recogerlas del fondo de las mallas.
Aunque lo de tocar pelotas es algo que hacen alguno más de una vez, pero a dos manos.
Sigo anclado en la desesperanza, Aguirre se empeña en que hacemos buen juego, que el día del Valencia lo hicimos bien, hoy aún no ha hablado, pero seguro que vuelve a usar sus palabras de prestidigitador , usando el lenguaje como solo él sabe hacerlo.
Aunque esta vez parece enfadado, y me alegro, la afición está muy harta, errores, más errores, y eso partido tras partido. Eso hay que arreglarlo, no sé cómo, yo solo soy un juntaletras, pero a ellos les pagan para eso, para arreglar eso, para que el equipo, su equipo no salga al campo como si fuese a ver un partido, sino a jugarlo.
El At. De Madrid no ha hecho nada, y se ha ido al descanso con un dos a cero, mis amigos de twitter, unos pocos, vamos casi ninguno aún confiaban en la remontada, pero los jugadores se empeñan en quitarles la razón.
En la segunda parte parecieron despertar un poco, pero eso, solo un poco, todo se volvió a convertir en utopía cuando Adrián de nuevo , en otra jugada con nuestra defensa de observadora, nos hace el tercero.
Juan Carlos fue lo único positivo del partido para mi gusto, él solo puso más juego en el bando zaragocista en sus pocos minutos sobre el campo que el resto del equipo juntos…
Aguirre debe arreglar esto, gritarles, reñirles, hacerles correr, nos falta intensidad, entrega, en una palabra huevos… porque es lo único que puede salvarnos.
Hay equipos que sin ser mejores que nosotros ponen todo sobre el campo y están por delante nuestro.
Por cierto Postiga marcó el gol del honor en el minuto 78, pero ni eso ha animado a los nuestros a intentar buscar el segundo y por ende el empate.
Cuando acaba el partido me siento como el miércoles, vacío, sin ilusión, sin esperanza…ya ni se puede hablar de tropiezos, solo de derrotas merecidas.
El domingo nos visita el Sporting, o les ganamos o nos puede dejar muy tocados.
A pesar de ello, aunque los jugadores no parezcan sentirlo, yo seguiré con mi frase, la de la Ronda de Boltaña:
No seré zaragozano, zaragocista el primero.
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