Nunca en los 80 años de historia del Real Zaragoza había existido tal situación. Jamás se había expresado tan claramente las desavenencias entre la afición y el máximo accionista del Club, Agapito Iglesias, y parte de sus directivos. Los zaragocistas de a pie ya estaban hartos del soriano desde hace tiempo, pero acabaron explotando.
Toda la movilización
comenzó a finales de 2011. El Zaragoza obtenía unos patéticos resultados deportivos.
Desde que se venció a la Real Sociedad 2-0 en La Romareda, los de Aguirre
cosecharon una racha de 10 partidos sin ganar (9 derrotas y un empate, contra
el Sporting de Gijón en Zaragoza), sumando la eliminación copera a manos del
Alcorcón (2ª División).
Dichos resultados produjeron
la destitución de Aguirre. Los aficionados sentían una impotencia tremenda y se
querían hacer oír. Se creó la Plataforma Salvemos el Real Zaragoza para unir y
canalizar las quejas de todo el zaragocismo, promoviendo una manifestación para
el 14 de enero, justo antes del partido contra el Getafe.
Sin embargo, Salvador Arenere llegó al club con un nuevo Consejo de
Administración, con la promesa de Agapito de apartarse de la gestión. Tras una
reunión de éstos con la Plataforma, les pidieron que suspendieran los actos de
protesta programados. Y así se hizo para animar al equipo todo lo posible en su
objetivo de permanecer en Primera.
Pero Arenere y los
suyos duraron poquísimo. Solamente diez días, explicando que se marchaban porque
Iglesias no cumplía con lo pactado y seguía realizando injerencias en la
gestión. El enésimo lío institucional hizo que la afición explotara
definitivamente. No se pudo realizar la manifestación ya programada, porque se
necesitan dos semanas de antelación para avisar al Ayuntamiento. Pero se
convocó una concentración en las inmediaciones de La Romareda, frente a las
oficinas de la Plaza Eduardo Ibarra, donde acudieron unos 11.000 zaragocistas.
En ese mismo partido
contra el Getafe se estrenó la “agapitada”, una pitada tremenda y sonora
secundada por todo el estadio, que se realiza en los minutos 32 de cada parte
en símbolo de protesta (en 1932 se creó el Real Zaragoza). Se mantuvo hasta el
final de temporada. Y contra el Villarreal, se llevó a cabo la “agapirada”, que
consistía en abandonar las gradas en el minuto 32 de la segunda parte, fuese
como fuese el resultado. No fue secundada por
mucha gente, pero varios aficionados la siguieron. El Zaragoza logró remontar
un resultado adverso (0-1), justo en esos minutos de abandono, con goles de
Luis García y Abraham.
Una vez pasado el
tiempo, sigue sin haber acuerdo acerca de la efectividad de la misma. Unos
creen que no sirvió para nada, mientras otros opinan que con esa protesta, se
dio un aviso serio a los jugadores. Cabe recordar que el partido anterior al
Villarreal fue la sonrojante derrota ante el Málaga (5-1) en la que el propio
Manolo Jiménez explotó y declaró sentir “vergüenza”. También hay que sumar la recogida
de miles de firmas para que Iglesias pusiera precio a sus acciones.
Se logró la salvación
y, con la renovación de Jiménez, salieron del club varias personas a las que
también iban dirigidas las críticas, como Pedro Herrera y Antonio Prieto, que
presentó él mismo su dimisión. Además, Agapito anunció que daba un paso atrás, Fernando
Molinos se convertía en el nuevo presidente y se le daban plenos poderes
deportivos a Manolo Jiménez, convirtiéndolo en manager del conjunto maño, al
más puro estilo inglés.
Comenzó la temporada y
apenas se siguió haciendo la “agapitada” ni ningún tipo de pacto parecido. Los
buenos resultados deportivos conseguidos hasta ahora han calmado la tensión
social que se vivía en el entorno zaragocista. Incluso la Plataforma anunció hace
unas semanas su desaparición.
¿Y
ahora qué?
La Plataforma se ha
disuelto, pero sigue el mismo espíritu. Ésta desaparece para dar lugar a una
futura Asociación Zaragocista, que pretenderá “dar cobertura a quienes en estos
momentos no tienen voz o la tienen a través de otra persona”, tal y como
expresan en su último comunicado.
Resumiendo. La
Plataforma unía a las diferentes secciones del zaragocismo (Ligallo, Colectivo,
Federación de Peñas, APARZ, etc.). Pero con la nueva Asociación, cualquier
aficionado, a nivel individual, podría participar si así lo desea. En su
desaparición, aparte de la poca actividad de los últimos meses, tiene que ver
la falta de acuerdo entre varios de los grupos componentes.
A falta de saber qué
objetivos tendrá dicha Asociación, lo más probable es que se forme una especie
de Supporters Direct. ¿Qué es un
Suportters Direct? Es una Asociación en la que se juntan aficionados y
accionistas de un determinado equipo, pagando una cuota anual, con el único
objetivo de ir comprando acciones progresivamente y compartirlas. Lo que se denomina
sindicación de acciones. Como su nombre indica, este movimiento viene de
Inglaterra y está promovido por el parlamento británico y la UEFA.
Un ejemplo es Tu Fe
Nunca Decaiga, del Sporting de Gijón. Esta tendencia está regida en España por
la Federación de Accionistas y Socios del Fútbol Español (FASFE), aunque tal
vez la futura Asociación no se una a dicha Federación por diferencias de índole
personal. Pero en Zaragoza no es la primera vez que se dan este tipo de
acciones. El Movimiento Avispa y la Asociación Aúpa Zaragoza vienen haciéndolo
últimamente.
Pueden contar a su
favor que Agapito en la última Junta, dejó entrever la posibilidad de una nueva
ampliación de capital, aunque igual la Asociación no estaría preparada aún. No se sabe cuándo
será su presentación, pero lo que sí es seguro es que procurarán entrometerse en
lo deportivo lo menos posible.
Lo negativo es que los
SD españoles, apenas cuentan con el apoyo del Gobierno Central. Todos pretenden
que el Gobierno secunde esta propuesta de alguna manera, como por ejemplo, en
forma de leyes, promoviendo alguna como la del 50+1 que triunfa en el fútbol
alemán o algo por el estilo, facilitando la venta de acciones.
Las protestas sociales
zaragocistas, de alguna manera, se han terminado, pero se han sentado las bases
para un futuro proyecto que, por qué no, podría acabar con una hipotética
compra del club por parte de los aficionados. Lo más importante es que se vaya
dando voz al zaragocista de a pie con la compra de acciones.
No hay comentarios:
Publicar un comentario