Popo, Lolo, Tato y demás . Real Zaragoza 1 Sporting 1

Ayer el Real Zaragoza empató .
Otro empate, otra jornada sin conocer la victoria y otra jornada más que, más rivales perseguidores se suman al pelotón de "aspirantes" aprovechando que no le ganamos a

nadie.
Ayer, tras más de dos años ausente del templo zaragocista, por una especie de promesa, esa que dije de que mientras Agapito fuese el que mandaba,no volvería a pisar la Romareda, volvía a sentarme en las viejas y sucias butacas de gol sur, como había hecho los dos años que fui abonado.
Tras estar con amigos , muchos, durante las horas anteriores al partido, volvía a la Romareda.
El ambiente era algo extraño, la entrada era buena, pero no se escuchaban los cánticos de los llamados "grupos de animación" , pero sí los ánimos del resto de la Romareda.
La afición esportinguista,era numerosa y educada, como siempre que han venido por la Romareda.
El partido comenzaba con dominio zaragocista, pero sin agobios, Insa y Pedro, que disparó al larguero, lo intentaron por alto, pero era un partido soso, sin punch, frío.
El Sporting se acercaba a Alcolea y el miedo se podía cortar en la Romareda. Solo Vallejo y a ratos Cabrera parecían estar entonados en defensa, especialmente el canterano, que en cada partido parece subir un peldaño en calidad, colocación y anticipación.
Llegaba el descanso, el empate a 0 seguía en el marcador .
En la segunda parte, Popovic empezó su plan para romper el partido, aunque en realidad lo que rompió fue al equipo.
Popovic al que mientras sea el entrenador de mi equipo defenderé a muerte, ayer, seguramente como otras veces, metió la pata.
Quitó a Galarreta, que por otra parte, no sé donde ha dejado la calidad que tenía a principio de temporada, y metió a Lolo.
La apuesta salió bien, porque en una falta en la lateral del área .lanzada por Pedro, varios jugadores intentan rematar, prolongando el pase y Dorca, de una manera casi acrobática introduce el balón en la portería gijonesa, por la escuadra en un disparo casi imposible.

Aquí podéis ver el gol, grabado por quien escribe



Solo 2 minutos duró el Real Zaragoza por delante. Un disparo sin aparente peligro y que Alcolea despeja incorrectamente dejando a Isma que meta el 1 a 1 a placer.

Poco después el Sporting de nuevo lanza al poste, Fernandez y Alcolea a trancas y barrancas deshacen el peligro. Se pidió mano de Fernandez, que podría haber supuesto un penalti , gol y la puntilla en forma de remontada.

El partido estaba roto, las ocasiones se sucedían , tanto en una como en otra banda. A mi el juego blanquillo me gustó en esos minutos.
Una falta en el centro de campo,  con un codazo a Pedro , echaba a Menendez del campo, por roja, y el Sporting se quedaba con 10.
Popovic decidió sacar a Willian José, Un jugador que pese a su altura, apenas se vio en el campo.
Tal vez Ranko quería igualar fuerzas y que ambos equipos jugasen con 10.
Para ello Insa tuvo que dejarle el sitio y el centro de campo se le entregó a los visitantes.
Las oportunidades se sucedían por parte local, pero los contraataques visitantes nos hacían contener la respiración.
Como no había suficiente miedo en las gradas zaragocistas, Tato salía por Jaime y dejaba a nuestro equipo roto por el eje.
En los últimos minutos , los que pusieron el peligro fueron los asturianos , al final un empate que tal vez sepa a derrota, Un empate que por momentos el que jugó en inferioridad fueron los maños, porque el Real Zaragoza no tiene banquillo. Nadie de los que salieron merecieron estar ayer sobre el campo.
Diego Suarez, Meseguer, Sergio Gil,... cualquiera de ellos lo harían mejor sobre el campo, lo pondrían todo sobre el césped , se comerían al rival y no tendríamos que ver los fallos de Lolo, la indolencia de W.José o el escaso nivel de Tato, por ser magnánimos con los tres.

Habrá que esperar al partido de la Ponfe para saber si seguimos en promoción o caemos al séptimo puesto.

A pesar de ello, ayer disfruté, volví a estar con amigos, volví a sentir el zaragocismo a flor de piel, volví a sufrir con los míos. 

No seré zaragozano, zaragocista el primero.