Esa es la palabra que define todo lo que vivimos ayer tarde en Bilbao. Sensaciones agridulces que voy a intentar contar.
Increíble San Mamés.- Vaya estadio que tienen en Bilbao. Una maravilla, un lugar donde da gusto ir al fútbol, donde se está cómodo, donde se ve impresionante desde cualquier lado. Unas instalaciones dignas de un grande del fútbol como es el Athletic (qué envidia ).
Increíble nuestra afición.- Que gozada de hinchada. Empujando desde el primer momento. Silenciando por completo a la afición bilbaína y apretando cuando peor nos lo estaban poniendo en el campo. Ojalá algún día este equipo sepa recompensar como se merece a esta afición, que siempre está a las duras y a las maduras.
Increíble Ranko Popovic.- Por favor Ranko, explícanos algún día a qué coño jugamos. Como puede ser que marquemos a los cinco minutos de juego y nos echemos atrás para esperar al rival. Que empecemos a perder tiempo faltando 20 minutos para acabar el partido ( fingiendo golpes, etc. ). Que estemos todo el segundo tiempo a merced de un equipo de chavales imberbes que lo único que les mueve es el corazón y el amor a su equipo. Que envidia ver a 11 chavales de la cantera dejándose el alma por su equipo. Lo que sí queda claro día a día es que tienes una flor en el culo, porque que ayer no nos empataran fue un milagro.
Increíble lo que pasó fuera del campo al final del partido.- Esto es lo que mata al fútbol, lo que te quita las ganas de disfrutar de tu equipo y te quita la pasión.
Cuatro "mierdas" que cobardemente atacaron a algunos aficionados nuestros, cuatro "mierdas" que se esconden tras unos colores y que campan tanto en los estadios como en la calle con total impunidad son los que nos quieren quitar la ilusión. NO lo vais a lograr jamás.
INCREÍBLE !!!!!!
Carlos
No hay comentarios:
Publicar un comentario