El partido de mañana, desde "Aire Azul"

El Real Zaragoza juega mañana un partido importante. El rival es el FC Barcelona B y el escenario, La Romareda. Sin embargo, la niebla que caerá sobre las cabezas de nuestros jugadores no provendrá del el Tibidabo, sino de las gradas de la vieja Basílica, que acogerá a una afición que se encuentra ahora mismo a medio camino entre el apoyo incondicional y el escepticismo que no acaba de sacudirse.

El año 2014 huele bien. Diez puntos de doce posibles es un buen argumento para sonreír levemente, pero es tanto el dolor que lleva acumulado esta afición que mañana será preciso que el equipo no solo logre la victoria sino que además convenza a sus seguidores de que ahora sí es posible empezar a pensar en que es posible el ascenso. En ese paisaje asoma la sombra de la ausencia por lesión de Arzo, uno de los artífices, sin duda, de la progresión del equipo. Parece mentira que la aportación de un jugador pueda llegar a ser tan deterrminante, pero el fútbol está lleno de casos como este y hará bien el grupo en empeñarse en mantener el espíritu que le ha aportado el castellonense precisamente mañana que él no estará.

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"Real Zaragoza, aire azul"